Tal vez podamos decir que la estrategia oficial esta teniendo algún éxito.
Incluso es llamativo que la mismísima Presidente se haya puesto a la cabeza del ataque contra Cobos. Posiblemente porque las estrategias anteriores no hacían mas que posicionarlo, Cristina Fernández ha decidió personalmente encarar la cruzada contra el “traidor”. Ahora bien, esta decisión es tan peligrosa como arriesgada, ya que pone en riesgo el cuestionado prestigio que le queda a la figura de Cristina, y peor aun puede potenciar la del Vicepresidente. El objetivo es desgastar la figura de quien por el momento encabeza el ranking para ser presidente.
Los que se suman por la renuncia son los oficialistas de todos los cargos ejecutivos y legislativos, algunos de sus aliados, pero tambien quienes se ven como potenciales contrincantes en 2011.
Como decíamos anteriormente, esta vez el gobierno no esta solo, los partidos de la oposición se están alineando bajo la idea de que el vicepresidente debe renunciar. Incluso ha provocado que Elisa Carrio (la multifacética, multifundadora e impredecible lider de la Coalición Cívica) haya opinado sobre la decisión presidencia de suspender la gira por China, declarando que la misma ha sido “prudente”. Y con respecto a Julio Cobos se refirió al mismo como “conspirativo” y agrego que “no se puede ser opositor y vicepresidente al mismo tiempo; esto es algo que lo debe resolver el vicepresidente".
Siguiendo la recorrida mediática de los políticos, Mauricio Macri también cargó contra el Vicepresidente y lo acusó, con menor énfasis que Carrió, de provocar una anormalidad que será difícil de sostener en el tiempo, haciendo referencia puntual a que siga ocupando el cargo.
Lo cierto es que todas las principales figuras políticas tienen algo que decir sobre el accionar de Julio Cesar Cleto Cobos, ya sea en contra o a favor, todos eligen opinar sobre el desempeño del vicepresidente. Posiblemente sea porque es uno los presidenciables que mas fuerte suenan para el 2011.
Sin duda debemos reconocer que la encrucijada en la que hoy se encuentra, no es más que responsabilidad propia por las decisiones que ha tomado políticamente en, al menos, los últimos 2 años. Pero, lamentablemente para Cobos, debe tomar una decisión, y debe ser pronto. Para no dilapidar el capital político propio que supo cosechar con la votación de “la 125” es momento de tomar decisiones, de elegir caminos, pero también será momento de dar explicaciones.
Lo que si podemos decir, es que el gobierno logro que la lupa pase a otro, al menos por unos días.
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